HC/E/PL 1280
GREECE
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Appellate Court
GREECE
POLAND
18 April 2013
Final
Rights of Custody - Art. 3 | Grave Risk - Art. 13(1)(b)
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The Court of Appeal ruled that the unilateral removal of the child was in violation of custody rights that the father held in accordance with the applicable law. The Court found that the applicable law was Greek family law pursuant to Article 20 of the Greek Civil Code (common nationality of father and child). Under Article 1515 of the Greek Civil Code, as amended by Law no 3719/26.11.2008, where parents are not married, but the child has been recognized by the father, he exercises parental responsibility, but only if an agreement exists between the parents. The rights of a father in such circumstances include, inter alia, the right to determine the habitual residence of the child.
The Court of Appeal found that pursuant to a written agreement between the father and mother concluded in 2007, they had agreed to exercise joint custody over the child. The Court further observed that, the amended Article 1515 of the Greek Civil Code did not distinguish between agreements made before or after the revision of the law. The Court noted that the parents had kept to their agreement after the entry into force of the new law (on November 2008) until 2009, when the mother went to Poland with the child. The Court held that the father had been actually exercising his custody rights and had not consented to the removal nor had he subsequently acquiesced in it.
The Court noted that there was no evidence the father had been violent to the child, though it observed that he had behaved aggressively towards the mother.
No evidence was furnished that the return of the child to Greece would expose it to a grave risk of physical or psychological harm or to an intolerable situation. The Court further noted that following the return of the child, the father would have the ability to take all the appropriate measures for its proper mental and physical development, upbringing, education, supervision and protection, since he was a self-employed doctor and had the ability to provide the required time along with his parents.
Author of the summary: Maria Psarra, LL.M., Greece
Preparation of INCADAT case law analysis in progress.
El Tribunal de Apelaciones declaró que el traslado unilateral del menor constituía una violación de los derechos de custodia del padre de acuerdo con el Derecho aplicable. Asimismo, declaró que el Derecho aplicable era el Derecho de familia griego conforme al artículo 20 del Código Civil de Grecia (misma nacionalidad del menor y del padre). En virtud del artículo 1515 del Código Civil de Grecia, modificado por la ley N° 3719/26.11.2008, cuando los progenitores no están casados pero el niño ha sido reconocido por el padre, este ejerce la patria potestad, pero únicamente si media acuerdo entre ambos progenitores. En tales situaciones, entre los derechos del padre se encuentra el derecho a determinar la residencia habitual del menor.
El Tribunal de Apelaciones declaró que, en virtud de un acuerdo celebrado en 2007 por escrito, los padres habían acordado ejercer la patria potestad de manera conjunta. Asimismo, el Tribunal observó que la modificación del artículo 1515 del Código Civil de Grecia no distinguía entre los acuerdos celebrados antes o después de la revisión de la ley. El Tribunal observó que los padres habían cumplido con el acuerdo luego de que la nueva ley entrara en vigencia (en noviembre de 2008) hasta el 2009, año en que la madre se fue a Polonia con el menor. El Tribunal declaró que el padre había estado ejerciendo la patria potestad efectivamente y no había prestado su consentimiento respecto del traslado del menor ni tampoco lo hizo más tarde.
El Tribunal señaló que no había pruebas de que el padre hubiera sido agresivo con el menor, aunque observó que sí había tenido una conducta violenta para con la madre.
No se aportaron pruebas que indicaran que la restitución del menor a Grecia lo expondría a un grave riesgo de daño físico o psicológico o a una situación intolerable. Asimismo, el Tribunal observó que, luego de la restitución del menor, el padre sería capaz de tomar todas las medidas adecuadas en pos del desarrollo físico y psicológico del menor, de su crianza, educación, cuidado y protección, ya que era médico autónomo y tenía la capacidad para dedicar el tiempo necesario junto con sus padres.
Autor del resumen: Maria Psarra, LL.M., Grecia
En curso de elaboración.